Scroogled fue el nombre de la campaña iniciada el año pasado por Microsoft contra Google, y este año esta de vuelta.
Google Play, la tienda de aplicaciones de la compañía del buscador ha sido el objetivo de Scroogled, pues Microsoft se ha encargado de lanzar una serie de anuncios en su contra y contra Google en general. Al parecer, con esta campaña, lo que busca Microsoft es evitar que los usuarios compren aplicaciones para sus dispositivos móviles Android, y para lograrlo, trata de resaltar los posibles problemas de privacidad a los que podemos enfrentarnos, citando una de las políticas de Google: "compartir nuestro nombre, e-mail y datos generales con desarrolladores de todo el mundo". Microsoft dice: “Si no puedes confiar en Google Play, tal vez no debas confiar para nada en Google”.
Sin embargo, unos días atrás, Microsoft realizó una denuncia contra Google ante la Comisión Europea en la cual muestra su preocupación de que Google pueda estar usando Android para sugerir a sus usuarios que utilicen únicamente sus propios servicios.
A mi juicio, tanto la campaña como la denuncia no poseen una buena base que las sustenten, por lo que me deja la incógnita de que es lo que realmente ha llevado a Microsoft a actuar de esta manera.
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